Karma fundido en bronce


En el corazón de Times Square, la justicia decidió cambiar los papeles. Esta vez, no es el acusado quien comparece, sino la acusadora.
¿Casualidad o karma con traje de bronce?
Cuando se usa la ley como garrote político, la ley a veces… regresa a ponerte las esposas.

Del pedestal al calabozo,
el bronce se puso mohoso.
La Justicia fue su disfraz…
y ahora se le cayó su antifaz.

La burra Leticia James

Letitia James decía que “nadie está por encima de la ley”…
¡Y terminó mordiéndose la lengua! Ahora le sacan trapitos bien sucios, justo cuando ella se creía la dueña del tribunal y el látigo.

La que acusaba a Trump de inflar cifras, parece que también le metía aire a las suyas. ¡Qué burrada, Letitia! El burro hablando de orejas… y con las suyas bien paradas.